Imagine

Buongiorno Principesa!
Una de mis mayores características es mi imaginación. Perdón, mi exacerbada, superlativa e infinita imaginación.
Desde niño me he imaginado cosas que no eran reales y, lo he hecho tan bien, que me las terminaba creyendo y, lo que es peor, hacía que algunos se las creyesen.

Uno de esos casos se dio a la salida del colegio cuando le dije a mi madre que me gustaría que algún año fuesemos al parque de atracciones de La Guerra de las Galaxias.
Mi madre supuso que sería el mejor regalo que me podría hacer nadie en la vida, así que se lo comentó a mi padre y les pareció bien.
Como no existía internet (no al menos para uso doméstico), fueron a la agencia de viajes a preguntar precios.
La muchacha les dijo que ella no había oído hablar nunca de ese parque y mis padres le decían que si, que yo se lo había dicho. Así que la muchacha de la agencia llamó a otras agencias y allí todo el mundo buscando como locos.
Lo que no sabían es que, al haber estado en Disneyland el verano anterior y ver la atracción de STAR WARS, yo me había imaginado ese parque de atracciones. Incluso dibujé un plano copiándome del de Disney que dividía el parque según los planetas y decorados.
Me pareció (y me lo sigue pareciendo) tan sumamente genial esa idea que supuse que alguien ya la habría llevado a la práctica. Resulta que no.

Pero no solo me ocurría de pequeño, ahora mismo me suele ocurrir que al escuchar música me imagino un rockero superstar dando un macroconcierto.
La cosa no pasa de graciosa cuando lo haces en tu casa y te ven tus padres. Lo mejor es cuando te pasa en el ascensor y alguien abre la puerta antes de que te de tiempo a soltar el micro.

Si que es cierto que el máximo exponente de mi imaginación es "El mundo a vista de Kike".
"El mundo a vista de Kike" es un programa de televisión que desde pequeño he pensado que verían en algún lugar. Es decir, para mi, mi vida era una serie que se emite 24 h. al día.
Por eso de pequeño pensaba siempre que todo lo que saliera en "El mundo a vista de Kike" sería una referencia para muchísimos niños.
No queda ahí la cosa, sino que creciendo ya un poco más (16 años en adelante) pensaba que hay muchas cosas que no son aptas pera menores y que alomejor había niños que lo estaban viendo.

Si en estas barbacoas hago algo indecente, procurare cerrar los ojos pa que no salga en "El mundo a vista de Kike".

Si, mi imaginación sigue tan despierta como hace 19 años.

PD: Una vez intenté convertirme en superguerrero y me dolió al final muchísimo la cabeza.