viernes, 10 de junio de 2016

Resistencia

La vida no deja nunca de golpear y, sin embargo, no nos queda otra que, habiendo probado el sabor de la tierra en nuestra boca condensando nuestra saliva, habiendo mordido la lona del pugilato de nuestra existencia, volver a levantarse. Y nos levantamos sabiendo que, probablemtente, volvamos a recibir tal cantidad de golpes que nos volverán a hacer caer. Y, una vez más, una tras otra, nos levantaremos. Resistiremos.

Los golpes no tienen por qué ser físicos. De hecho, en la mayoría de ocasiones no lo son. Los golpes son morales, no los vemos venir, o los vemos venir pero tenemos la esperanza de saber afrontarlos. Los vemos venir y pensamos que frenarán antes de atizarnos, que esta es la vez que no nos la llevamos, que nos quedamos en pie. Pero caemos.

Nos miran, nos dicen "pero ya te lo sabes". Y te resignas, lo admites, te sacudes la desilusión y vuelves a tener esperanza en que todo cambie.

Eso es la resistencia. Que den las 14:00, enciendas la televisión y esperes que el capítulo de los Simpson sea un capítulo de los antiguos. Probablemente no pase, pero mañana volveremos con la misma esperanza.

Resistimos.

No hay comentarios:

Publicar un comentario